Aproximadamente hace cuatro años se unificó en una sola hinchada organizada que se denominó “La barra de la O ”, esto se creó debido a que existían muchas diferencias entre las tres hinchadas que eran como la repartición de entradas, los lugares en el sector de graderías, la colocación de banderas etc. Debido a éstos inconvenientes el Fiscal Antidisturbios Blas Imas dialogó con los hinchas y les propuso que se unificará la hinchada en una sola para que de esta manera se pueda terminar con las diferencias.
Los miembros aceptaron la unificación y eligieron como líder de la hinchada organizada del Olimpia a Adolfo Trotte, un hombre que desde los 15 años ha formado parte de la gradería Sur alentando al equipo de sus pasiones.
Desde la unificación en una sola hinchada hoy por hoy según el fiscal antidisturbios ha disminuido bastante los hechos de violencia entre los hinchas franjeados.
La fiesta empieza horas antes del inicio del encuentro, en las inmediaciones del estadio, donde comienzan a aparecer ya los primeros vendedores de vinchas, banderines y afiches.
Cerca de allí, los miembros de la hinchada se van agrupando poco a poco. Comienzan a desplegarse las banderas y los cánticos empiezan a calentar el ambiente de la tarde. Tras bambalinas, los jefes de las barras que conforman la hinchada se reúnen, ajustan los últimos detalles de cómo será el recibimiento al equipo y acuerdan con
Una vez adentro, la hinchada inicia su gran espectáculo. Canta, aplaude, se alegra y también sufre, pero siempre está allí, en un lugar de las graderías, siguiendo con fidelidad al equipo de sus pasiones.
La hinchada olimpista es parte esencial e inseparable de la historia de las grandes conquistas del Olimpia, especialmente en el fútbol, deporte que posee mayor cantidad de seguidores.
Desde hace varias décadas la hinchada del Olimpia se maneja bajo un orden que la llevó a ser hoy en día la mejor organizada del País.
Esta organización se hace palpable en los coloridos recibimientos que recibe el equipo, especialmente en partidos trascendentales, en los que el espectáculo de luces y la coordinación del grupo son simplemente fascinantes.
En cada partido se puede apreciar la pasión de la hinchada por la camiseta, siempre están allí. Recuerdo un hecho anecdótico que nunca se me olvida que una vez fueron los hinchas del club Cerro Porteño a presenciar un partido y sólo asistieron al encuentro “25 pagantes”, esto hace la diferencia entre los hinchas del club Olimpia por que aunque pierda o aunque gane siempre están allí alentando al equipo franjeado, siendo el gran jugador número 12.
